Es fácil saber por qué a Javier Facciuto le encantan las películas del director alemán Werner Herzog: es un tipo dispuesto a imponer lo suyo sin importar las pésimas condiciones. Lo cierto es que el asistente de dirección de Recortadas es un experto a la hora de cargarse la película al hombro, pero, por suerte, es más normal que un Klaus Kinski. Hasta nos confesó lo que sigue.
¿Cómo llegás a Recortadas?
A la peli llegué en una charla con Sebas (De Caro) el año pasado. “Vamos a hacer una peli”, dijimos. Había una idea medio bosquejada de la película, pero no más que eso. Una película de terror. Y ahí empezamos. Planificamos un poco cómo, cuándo, con qué. Así fue tomando forma. No hay ningún secreto. Después se sumó gente. Sebas empezó a escribir el guión, yo estaba al tanto de cómo iba la historia. (Sebas) iba contando por capítulos y así nos enganchaba a todos durante las reuniones. Podría haber sido una película en episodios (risas). De pronto teníamos el equipo técnico confirmado, estábamos viendo cómo la grabábamos, y el guión no estaba terminado. Una cosa medio rara, pero estuvo bueno (risas).
¿Qué fue lo más desafiante en cuanto a organización?
El bajo presupuesto. Es una epopeya hacer una película con bajo presupuesto. Y estaba planteado así. Hacer una película de guerrilla. Se planteó en un momento: “Paremos y la hacemos más adelante y con más guita, o seguimos”. La fecha era clara, empezamos en septiembre y empezamos en septiembre. Se juntaron Mauro, Caserta, hubo un poco de guita y le metimos, aun sin saber si íbamos a terminar la película. Pero nos fue bien. Y esees el tema: lograr que todos estén cómodos y tranquilos y trabajen bien en condiciones que no son las mejores. Lo importante es que el ánimo sea bueno, que filmar no sea una tortura, sino una fiesta. Y por momentos se logra..
¿Sos fanático del género terror, suspenso?
Al cine de género siempre lo tuve medio relegado. Cuando estudiás cine ves a los grandes directores, pero a los géneros los ves como algo inferior. Y al género de terror, como al más inferior del inferior. Pero ahora me causa diversión. Está bueno además porque lo que no podés realizar por cuestiones de producción o lo que sea, el género lo abarca. Y está bueno hacer cine de género en Argentina.
¿Qué podemos esperar de Recortadas?
Un éxito. Un éxito total. No hay medios tintas. Va a ser un éxito total. Si me preguntás qué es un éxito, lo podemos discutir (risas). Que estemos cerca de terminar la película ya es un éxito. Cada jornada que grabamos es un éxito. Tachar una escena es un éxito. La película está quedando bien. Es divertido hacerla.
¿Cómo llegás a Recortadas?
A la peli llegué en una charla con Sebas (De Caro) el año pasado. “Vamos a hacer una peli”, dijimos. Había una idea medio bosquejada de la película, pero no más que eso. Una película de terror. Y ahí empezamos. Planificamos un poco cómo, cuándo, con qué. Así fue tomando forma. No hay ningún secreto. Después se sumó gente. Sebas empezó a escribir el guión, yo estaba al tanto de cómo iba la historia. (Sebas) iba contando por capítulos y así nos enganchaba a todos durante las reuniones. Podría haber sido una película en episodios (risas). De pronto teníamos el equipo técnico confirmado, estábamos viendo cómo la grabábamos, y el guión no estaba terminado. Una cosa medio rara, pero estuvo bueno (risas).
¿Qué fue lo más desafiante en cuanto a organización?
El bajo presupuesto. Es una epopeya hacer una película con bajo presupuesto. Y estaba planteado así. Hacer una película de guerrilla. Se planteó en un momento: “Paremos y la hacemos más adelante y con más guita, o seguimos”. La fecha era clara, empezamos en septiembre y empezamos en septiembre. Se juntaron Mauro, Caserta, hubo un poco de guita y le metimos, aun sin saber si íbamos a terminar la película. Pero nos fue bien. Y esees el tema: lograr que todos estén cómodos y tranquilos y trabajen bien en condiciones que no son las mejores. Lo importante es que el ánimo sea bueno, que filmar no sea una tortura, sino una fiesta. Y por momentos se logra..
¿Sos fanático del género terror, suspenso?
Al cine de género siempre lo tuve medio relegado. Cuando estudiás cine ves a los grandes directores, pero a los géneros los ves como algo inferior. Y al género de terror, como al más inferior del inferior. Pero ahora me causa diversión. Está bueno además porque lo que no podés realizar por cuestiones de producción o lo que sea, el género lo abarca. Y está bueno hacer cine de género en Argentina.
¿Qué podemos esperar de Recortadas?
Un éxito. Un éxito total. No hay medios tintas. Va a ser un éxito total. Si me preguntás qué es un éxito, lo podemos discutir (risas). Que estemos cerca de terminar la película ya es un éxito. Cada jornada que grabamos es un éxito. Tachar una escena es un éxito. La película está quedando bien. Es divertido hacerla.
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