La tía Mirtha

Durante los rodajes en La Plata, más precisamente en la colonia La Armonía, contamos con la buena predisposición de la Tía Mirtha. En realidad, es la tía de Eugenia, la responsable de las locaciones platenses, pero el resto del equipo también le decíamos Tía. Cuando no estaba preparando cosas ricas para los Recortados o dispuesta a tirotear a las alimañas campestres a altas horas de la madrugada, presenció, silenciosa, la filmación. Como no es habitual que en aquella zona se realicen películas, ella y Daniel, su marido, no paraban de asombrarse.
He aquí algunas impresiones de la Tía.

¿Cómo fue la experiencia de ver su casa convertida en set de filmación?
Hermosa. Muy linda. Yo nunca pensé que iba a tener tanta gente en mi casa ni la experiencia de ver esto. Mi sobrina, de chiquita, siempre venia acá. Así que le dije: “El día que quieras hacer algo, acá está mi casa”.

¿La anécdota más memorable?
Las motos. Todo. Todos los chicos: buenos, sencillos, ninguno “nariz para arriba”. Todas cosas buenas, todo experiencia. Eso es lo más lindo. No me lo voy a olvidar nunca. Te queda en la mente. Se la voy a contar a mis nietos. Por eso quiero fotos. Se las voy a pedir a Eugenia (risas).

¿Le gusta el cine?
Me encanta. Lo que pasa es que hace más de veinte años que no voy al cine: porque estamos lejos, porque no se puede. Y más las argentinas, porque entiendo lo que dicen.
Me gusta la comedia. Minguito, Luis Sandrini...

¿Cuáles son sus expectativas?
Va a ser un éxito, porque es (una película) muy realista.